mi nuevo trabajo...

Me fui quitando lentamente la camisa, pues la situación me tenía un poco incomodo, para luego seguir con mis pantalones y entrar en la bañera.
Inmediatamente sentí el contacto con su cuerpo y los pétalos de rosa que habían en la bañera.

Vi que se acercaba y que jugaba con algunos petalos, con la sonrisa de niña traviesa que tenía.
- si, estoy bien - tome su mentón entre mis manos para acercar mi rostro al suyo. No sabía como iba a reaccionar, pero debía atreverme a realizar ese tipo de acto...

- besarla por ahora - le bese, introduciendo mi lengua en su boca apasionadamente, para luego separarme de ella y mirar sus ojos nuevamente - solo hare más si usted me lo permite ...Misa-sama

- Misa - repetí antes de besarla nuevamente y comenzar a acariciar su cuerpo, suave con los petalos de rosa en el agua y la espuma que se desacía con el agua.
comencé acariciando sus hombros, besandolos, para luego bajar hasta sus senos y jugar con ellos.

- me atrevo a decir que... es hermosa - la bese nuevamente, para sentir una sensación que hacía que mi pecho doliera, pero era soportable. Sabía que esa sensacion era buena y no temía sentir dolor.
Su cuerpo en si era perfecto, así que lo acaricie con delicadeza, cada curva, cada rincón de su cuerpo que era un mapa infinito sin recorrer.
Comencé a rozar su entrepierna con mi miembro suavemente mientras besaba su cuello y acariciaba su cabello.

- a-ah~~ - no pude reprimir un gemido leve, pues todo el ambiente habia hecho que me excitara...y su cuerpo no era tampoco una excepcion de eso.
Pero supe como recuperar la situacion a mi favor cuando comence a introducir la punta de mi miembro dentro de ella para comenzar de apoco provocandole placer.

siguiendo sus ordenes, comenze a penetrarla totalmente, cuando ya estaba duro, mientras jugaba con los pechos de misa, sobandolos suavemente y mordiendolos.
Deje escapar unos cuantos gemidos, cuando mi pecho comenzó a doler nuevamente, provocando una mueca en mi, pero no le di importancia....este momento debía disfrutarlo.

Abraze tambien a Misa mientras comenzaba a mover mis caderas, introduciendo y sacando fuertemente mi miembro de la entrepierna de misa, tomando sus caderas con mis manos para moverla a mi ritmo.

Noté que soltaba pequeñas lagrimas, junto con gemidos, y no pude evitar detener un poco el ritmo para acariciar su rostro.
- ¿sucede algo, misa? - le lamo delicadamente la lagrima de su rostro para volver la vista denuevo hacia ella a espera de su respuesta.

- no lo hare - un enorme dolor, muy parecido a la tristeza, se posó en mi pecho al ver la expresión de Misa - jamás...
Le devolví el beso, profundamente, para abrazarla y acurrucarla en mi pecho

No pude evitar sonreír para mi mismo. Sus caderas comenzaban a moverse, al mismo tiempo que yo continuaba sacando y metiendo mi miembro de ella, haciendo que gimiera fuertemente mientras la abrazaba, reduciendo el espacio entre nosotros.
- ~señorita pervertida~~ - no pude evitar susurrarselo al oido mientras la penetraba cada vez con más fuerza.